Es natural sentir temor, enojo, soledad o tristeza cuando te enterás que vivís con VIH. Puede que te de bronca y sientas que la persona con la cual te infectaste te traicionó. Podés sentir miedo pensando en como reaccionarán tus seres queridos al saberlo.
Podes sentir temor ante la idea de enfermarte. Algunas personas pueden no sentir absolutamente nada. Todas estas reacciones son humanas y, en la mayoría de los casos quedan atrás con el correr del tiempo.
Saber que tenes VIH te generará diferentes sentimientos y emociones. Los primeros meses despúes de enterarte son un período duro y difícil. A medida que pasa el tiempo, y si buscas y recibis apoyo, la intensidad de estas emociones irá disminuyendo.
Si te conectás con gente que vive con VIH te vas a dar cuenta que no sos la única persona con estos sentimientos. Compartir con ellas las experiencias y sensaciones te ayudará a disminuir tu soledad y tus temores.
Normalmente, cuando estamos deprimidos y tristes dejamos de hacer cosas con las que disfrutabamos, con lo cual la tristeza y depresión aumentan, y darte cuenta de esto te hace sentir peor.
Averiguá todo lo que quieras y necesites saber sobre el VIH y las organizaciones y personas que están dispuestas a ayudarte. Esto te permitirá sentir un mayor control sobre tu vida.
Recuerda que vivir con VIH puede ser un desafío y que podés aprender a vivir con él.
Podes sentir temor ante la idea de enfermarte. Algunas personas pueden no sentir absolutamente nada. Todas estas reacciones son humanas y, en la mayoría de los casos quedan atrás con el correr del tiempo.
Saber que tenes VIH te generará diferentes sentimientos y emociones. Los primeros meses despúes de enterarte son un período duro y difícil. A medida que pasa el tiempo, y si buscas y recibis apoyo, la intensidad de estas emociones irá disminuyendo.
Si te conectás con gente que vive con VIH te vas a dar cuenta que no sos la única persona con estos sentimientos. Compartir con ellas las experiencias y sensaciones te ayudará a disminuir tu soledad y tus temores.
Normalmente, cuando estamos deprimidos y tristes dejamos de hacer cosas con las que disfrutabamos, con lo cual la tristeza y depresión aumentan, y darte cuenta de esto te hace sentir peor.
Averiguá todo lo que quieras y necesites saber sobre el VIH y las organizaciones y personas que están dispuestas a ayudarte. Esto te permitirá sentir un mayor control sobre tu vida.
Recuerda que vivir con VIH puede ser un desafío y que podés aprender a vivir con él.